A través del Séptimo Concurso de Valorización de la Investigación en la Universidad, del Programa Fondef, se busca fomentar una cultura de innovación basada en ciencias. Las postulaciones están abiertas para todo el país hasta el próximo 7 de junio.
Un detector desarrollado en Chile es capaz de determinar si el agua potable posee niveles aceptables de arsénico o es definitivamente tóxica. Se trata de un “biosensor”, un dispositivo que funciona utilizando microorganismos modificados genéticamente: cambia de color ante la presencia de este metal.
Esta innovación fue creada como parte de un proyecto de tesis ideado por la estudiante de bioquímica de la Universidad Adolfo Ibáñez, Tammy Atallah, beneficiada por el Concurso Valorización de la Investigación en la Universidad (VIU).
Este concurso entrega recursos para que estudiantes como Tammy Atallah puedan convertir sus proyectos de tesis en un emprendimiento: los proyectos seleccionados cuentan con hasta $26 millones para materializar las iniciativas. Entre 2012 y 2016 el número de proyectos adjudicados para ejecutar en primera etapa prácticamente se duplicó: pasó de 49 a 84 tesis financiadas.
Por séptimo año consecutivo la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica, CONICYT, convoca a estudiantes universitarios de pre y postgrado que estén llevando adelante sus tesis o memorias universitarias, a participar de una nueva convocatoria de su concurso VIU.
Implementado a través del Programa Fondef, el instrumento busca fomentar una cultura de innovación basada en ciencia y está dirigido a alumnos de universidades nacionales acreditadas y/o postgrados acreditados, los que deben contar con el respaldo de la casa de estudios a la que pertenecen y también de un profesor guía. Este último debe haber participado como investigador en proyectos de ciencia básica, aplicada, desarrollo e innovación tecnológica, sean estos financiados por fondos o agencias del Estado, o bien por su propia universidad.
Los planes de negocio y planes de trabajo presentados por los estudiantes son evaluados por un panel de expertos nombrados por CONICYT, el que está integrado por profesionales destacados de los sectores académico y empresarial.
Cada alumno deberá, además, comprometer dedicación total al proyecto y considerar la participación de mentores en negocios (una o más personas, por ejemplo, un panel de apoyo técnico de expertos multidisciplinarios) con experiencia en la creación de empresas con base tecnológica. Estos deberán apoyar el desarrollo y validación de prototipos o bien facilitar las conexiones necesarias para la implementación del modelo de negocios.
Debido al interés que se presenta en regiones (un tercio de los proyectos corresponde a la Región del Biobío), existen recursos específicos provenientes del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC Regional), que busca apoyar aquellas iniciativas que aborden temáticas tendientes a fomentar el desarrollo productivo de las diversas zonas del país.
Las postulaciones se extienden desde el 24 de abril hasta el 7 junio de 2017 y se pueden realizar directamente a través de la web de CONICYT.