Ambos académicos de la Casa de Bello fueron elegidos para integrar esta instancia que hoy encabeza la Premio Nacional, María Teresa Ruiz.
Como una “enorme satisfacción personal por haber logrado uno de los reconocimientos científicos más importantes en mi trayectoria académica”, calificó el académico de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas y profesor Titular de la Universidad de Chile, Sergio Lavandero, su elección para integrar la Academia Chilena de Ciencias como Miembro de Número, reconocimiento que compartió con el académico del Departamento de Geofísica de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, José Angel Rutllant.
Para el profesor Rutllant, en tanto, el paso de miembro correspondiente a miembro de número, es “una gran responsabilidad”. Esta instancia, destacó el académico, impacta también a la disciplina de la geofísica “que es mi especialidad, que estaba subrrepresentada”.
El profesor Lavandero tuvo palabras también para “recordar, reconocer y agradecer la ayuda de tantas personas e instituciones que han sido claves en mi desarrollo”, entre las que mencionó a “sus formadores”, Mario Sapag-Hagar, Arturo Ferreira Vigouroux, Takami Oka, Ramón Corbalán Herreros y Cecilia Hidalgo Tapia, quienes “con sus ejemplos de vida me guiaron en este fascinante y apasionante camino científico”.
El también director del ACCDiS también agradeció a las facultades de Ciencias Químicas y Farmacéuticas y de Medicina, “por haberme brindado un estimulante ambiente académico”, así como a sus “talentosos estudiantes de pregrado, postgrado y postdoctorado que a lo largo de esta trayectoria confiaron en mí y me dieron la oportunidad de guiarlos e impulsarlos a ser nueva/os científica/os”.
En la misma línea Rutllant –profesor titular y experto en Ciencias Atmosféricas- manifestó que hoy, al estar en la culminación de su carrera, se encuentra interesado en “la educación”, área en la que “hay mucho que hacer y la academia tiene que tener un rol importante, porque muchas veces no se le consulta sobre programas de estudios para educación media y básica. Allí la ciencia hay que hacerla de otra manera, tiene que ser algo entretenido, algo que le enseñe a pensar a los niños, que es el objetivo fundamental a la educación”.
El profesor Rutllant agradeció también al profesor Nibaldo Bahamonde, académico de la U. de Chile y Premio Nacional de Ciencias Naturales 1996, también integrante de la Academia Chilena de Ciencias.
Los miembros de las Academias que integran el Instituto de Chile, entre ellas la de Ciencias, pueden ser de cuatro clases: de Número, Correspondientes Nacionales, Correspondientes Extranjeros y Honorarios.
De estos cuatro, sólo los primeros gozan de derecho a voto en las deliberaciones que se lleven a cabo. La Academia de Ciencias está integrada hasta por 36 Miembros de Número y cuya elección es a perpetuidad.