El Presidente de CONICYT y asesor científico de la Presidencia de la República, descartó que los proyectos Fondecyt disminuyan el 2018.
En el marco del intenso trabajo que encabeza Mario Hamuy, Presidente de CONICYT y asesor científico de la Presidencia de la República, para recoger las preocupaciones de la comunidad académica nacional sobre el proyecto de ley que crea el Ministerio de Ciencia y Tecnología, se realizó el viernes 3 de noviembre en la Facultad de Química una charla sobre la futura institucionalidad propuesta para la ciencia, tecnología e innovación (CTI).
Mario Hamuy valoró la contribución de la Universidad Católica en el proceso de elaboración del proyecto de ley. “Socializar el proyecto de ley es fundamental para recoger las preocupaciones de la comunidad académica. De hecho, desde el año pasado vengo reuniéndome con la UC invitado por el rector para conversar con el comité que estaba pensando en la futura institucionalidad y que elaboró un documento que a mí y a todo el equipo que está trabajando en la elaboración del proyecto de ley nos sirvió mucho como insumo”, señaló.
La charla contó con la asistencia de académicos de las facultades de ciencias biológicas, matemáticas, física y química. La Decana de la Facultad de Química, Barbara Loeb, explicó que la invitación a Mario Hamuy surgió del interés de los decanos de ciencias en saber de primera fuente el alcance del proyecto de ley y que los académicos también tuvieran la posibilidad de informarse.
Nuevo sistema de CTI
Según explicó Hamuy el proyecto legislativo incluye además del Ministerio de Ciencia y Tecnología, la creación de otras instancias de institucionalidad que en su conjunto conformarán el nuevo sistema nacional de CTI. Estas instancias son la Agencia de Investigación y Desarrollo que es el sucesor de Conicyt, un Consejo Nacional de CTI para el Desarrollo con carácter de asesor de la Presidencia de la República y que tiene a cargo la elaboración de la política de Estado que oriente aquella definida cada cuatro años por el gobierno. Asimismo, la propuesta crea un Comité Interministerial que funcione como instancia de coordinación entre los Ministerios de Ciencia y Tecnología, Educación, Economía y Hacienda.
Un aspecto relevante del futuro Ministerio, destacó Hamuy, será la desconcentración regional en la forma de macro Seremías ubicadas en cinco macro zonas geográficas que reúnan regiones con vocaciones compartidas. “La idea es que los macro seremis puedan generar sinergias entre las distintas regiones aledañas para impulsar proyectos comunes, aglomerar capacidades y generar masas críticas en torno a temas relevantes para esas macro regiones”, señaló.
Luego, el decano de Ciencias Biológicas, Dr. Juan Correa, moderó la sesión de preguntas. Una de las principales inquietudes planteadas por los académicos presentes fue la inversión en CTI. En este sentido, Hamuy aclaró que el proyecto de ley no hace alusión directa a cuanto el país debe invertir en la materia, sino que define institucionalidad, es decir, los espacios para tomar definiciones estratégicas, políticas y de ejecución. Sin embargo, fue enfático en señalar que “sólo es posible aumentar la inversión en CTI con una institucionalidad. Si seguimos con la situación actual, donde Conicyt es una agencia dentro del Ministerio de Educación que tiene otras preocupaciones, con muy poco grado de coordinación con los otros ministerios y sin una estrategia clara, va a ser muy difícil avanzar en esta dirección”.
Asimismo, durante la reunión se planteó la preocupación a raíz de reportes de prensa que indicaron una disminución del financiamiento público para la investigación en ciencia y tecnología para el 2018. En este sentido, Hamuy afirmó que el presupuesto de Conicyt para el próximo año aumenta en 3 mil millones de pesos reales que serán destinados a Fondecyt, lo que sumado al aumento del cerca de mil millones de pesos adicionales de presupuesto para la Iniciativa Científica Milenio y la mantención del presupuesto para Corfo, significa un incremento de los recursos públicos destinados para investigación científica y tecnológica. “Los proyectos Fondecyt en ningún caso van a disminuir. El 2017 se adjudicaron 517 proyectos y el 2018 no debiéramos estar por debajo de eso, probablemente haya un incremento leve”, señaló.
Al finalizar su presentación Hamuy, enfatizó que la creación del Ministerio de Ciencia y Tecnología “es un punto de partida, un espacio de institucionalidad que hay que dotar de contenidos, reglamentos, etc. Está todo por hacerse a partir de esta plataforma y la posibilidad de apalancar más recursos”.
El proyecto de ley que crea el Ministerio de Ciencia y Tecnología logró en septiembre pasado el respaldo unánime en su primer trámite legislativo en el Senado. Actualmente se encuentra en la Comisión de Hacienda de la Cámara Alta donde se espera incorporar algunas indicaciones pendientes antes de la votación particular en Sala y comenzar el segundo trámite legislativo en la Cámara de Diputados.
Información periodística: Ana María Abraham, a.abraham@uc.cl